Camino del Atlántico

Qué es el Camino del Atlántico?

El Camino del Atlántico no es una ruta recién descubierta ni un Camino de Santiago olvidado rescatado del pasado; es una innovadora propuesta viajera generada por una agencia de viajes especializada en el Camino de Santiago. Esta ruta ha sido cuidadosamente diseñada para conectar dos de los caminos más emblemáticos que atraviesan la provincia de A Coruña: el histórico Camino Inglés, que parte desde A Coruña hacia Santiago de Compostela, y el místico Camino de Fisterra-Muxía, extendiéndose hasta el “fin del mundo” en las costas gallegas. El Camino del Atlántico ofrece a los viajeros una experiencia única, combinando la rica tradición peregrina con la belleza natural, cultural y gastronómica de Galicia, en un viaje que promete no solo ser un recorrido físico, sino también una travesía espiritual y emocional.

La Ruta: Uniendo Dos Puntos del Atlántico

El Camino del Atlántico se presenta como una odisea que parte desde la vibrante ciudad de A Coruña, siguiendo la ruta del Camino Inglés hasta Santiago de Compostela, y no se detiene allí. Desde la capital espiritual de Galicia, el camino se extiende hasta alcanzar Fisterra y Muxía, lugares donde la tradición cuenta que los peregrinos quemaban sus ropas al finalizar su viaje (ya no lo hagáis, vale?). Este trayecto no solo une dos puntos geográficos bañados por el mismo océano sino que también conecta al viajero con una experiencia de renacimiento personal y colectivo.

Etapas del Camino del Atlántico

El viaje se desgrana en etapas cuidadosamente planificadas, cada una revelando un aspecto único de Galicia, desde su rica historia y cultura hasta sus impresionantes paisajes naturales.

A Coruña a Santiago de Compostela: Siguiendo el Camino Inglés, esta sección del viaje invita a descubrir la Galicia más auténtica, con un recorrido que siempre está imbuido de una profunda espiritualidad y belleza.

  • A Coruña – Tabeaio: Iniciamos nuestra aventura en A Coruña, donde la primera etapa de 18,7 km de dificultad baja nos lleva a través de la Ría de O Burgo hacia Tabeaio. Este tramo, caracterizado por su sencillez y la ausencia de desniveles significativos, nos ofrece vistas encantadoras de la región, destacando la Iglesia de Santiago de Sigrás como un punto de interés antes de llegar a nuestro destino.
  • Tabeaio – Hospital de Bruma: La siguiente etapa, de Tabeaio a Hospital de Bruma, abarca 13,6 km y mantiene una dificultad baja. El camino se adentra en el verdor interior de Galicia, revelando caminos rurales y paisajes típicos gallegos. La jornada culmina con la subida al alto de Peito, punto en el que nos unimos a los peregrinos del Camino Inglés provenientes de Ferrol, antes de alcanzar Hospital de Bruma.
  • Hospital de Bruma – Sigüeiro: Desde Hospital de Bruma a Sigüeiro, nos enfrentamos a una etapa de 24,4 km con dificultad media. Este tramo se caracteriza por su relativa sencillez y terrenos planos, combinando pistas asfaltadas y de tierra. A lo largo de la etapa, los campos verdes y los pequeños pueblos gallegos ofrecen una experiencia auténtica de la vida rural en esta región.
  • Sigüeiro – Santiago de Compostela: La última etapa del Camino del Atlántico antes de llegar a Compostela parte de Sigüeiro, de 15,7 km y dificultad baja, marca el acercamiento a la meta de Santiago. Este tramo disfruta de la belleza del Bosque Encantado y, aunque comienza en un área industrial, pronto da paso al encanto del casco histórico de Santiago, culminando con la impresionante vista de la Catedral de Santiago.

Santiago de Compostela a Fisterra y Muxía: Esta segunda fase del camino lleva a los peregrinos más allá de la tumba del Apóstol Santiago, hacia los “fines de la tierra” (Fisterra) y la sagrada Muxía. Aquí, el camino se convierte en una meditación sobre el fin y el renacimiento, ofreciendo kilómetros de reflexión y belleza natural inigualable.

  • Santiago de Compostela – Negreira: Partiendo de Santiago hacia Negreira, esta etapa de 20,6 km de dificultad baja/media nos lleva por un camino cómodo, adornado con paisajes variados. La ruta incluye la subida a Mar de Ovellas y el cruce del puente de origen medieval en Ponte Maceira, destacado dentro de la Asociación de Pueblos Bonitos de España.
  • Negreira – Olveiroa: La etapa de Negreira a Olveiroa, de 33,6 km y dificultad media/alta, presenta un desafío en cuanto a distancia pero recompensa con imponentes paisajes. El camino se aleja de lo urbano para adentrarse en bosques de robles y castaños, subiendo al Monte Aro y ofreciendo vistas del embalse da Fervenza, bañado por el río Xallas.
  • Olveiroa – Cee: En la etapa de Olveiroa a Cee, de 19,3 km y dificultad media, el camino nos guía hacia el mar. Esta ruta nos lleva hasta Cruceiro da Armada, donde por primera vez avistamos el mar, marcando el inicio de la fase final de nuestra travesía hacia el Atlántico.
  • Cee – Fisterra: Dirigiéndonos de Cee a Fisterra, esta etapa de 12,9 km de dificultad baja nos acompaña el Océano Atlántico en un tranquilo paseo hasta el Cabo Fisterra. Aquí, el viaje se corona con la posibilidad de disfrutar de una de las puestas de sol más hermosas del Camino de Santiago.
  • Fisterra – Lires: En la etapa de Fisterra a Lires, de 15,6 km y dificultad baja/media, retrocedemos desde Fisterra hacia Langosteira y avanzamos hacia San Martiño de Duio. Superada esta aldea, ascendemos hacia Buxán, punto medio de la ruta, y seguimos por pequeñas aldeas hasta llegar a Lires, ofreciendo una visión auténtica del paisaje rural gallego.
  • Lires – Muxía: Finalmente, el tramo de Lires a Muxía, de 14,3 km y dificultad media, nos lleva a través de un ascenso hasta Facho de Lourido, ofreciendo vistas impresionantes antes de descender hacia Muxía. Este último tramo culmina en la sagrada Virxe da Barca, cerrando nuestra experiencia en el Camino del Atlántico con un profundo sentido de logro y renovación.

Cada etapa está diseñada para ser accesible y enriquecedora, permitiendo a los viajeros de todos los niveles participar en esta experiencia única.

Experiencia Peregrina: el Camino del Atlántico

El Camino del Atlántico no es solo un viaje físico; es una invitación a sumergirse en la riqueza cultural y espiritual de Galicia. Los peregrinos tendrán la oportunidad de:

  • Explorar la herencia rural de Galicia, palpable en sus paisajes, su música y sus antiguas tradiciones.
  • Degustar la gastronomía gallega, famosa por sus mariscos, carnes, panes, caldos y grelos, vinos, licores y la emblemática tarta de Santiago.
  • Vivir la hospitalidad gallega, alojándose en albergues y hoteles que ofrecen una cálida bienvenida a los viajeros.

El Camino del Atlántico es más que una ruta; es una promesa de transformación. Al unir A Coruña con Santiago, y extendiéndose hasta Fisterra y Muxía, ofrece una experiencia peregrina sin igual, marcada por la belleza, la historia y la espiritualidad. Desde los senderos que serpentean a través de bosques ancestrales hasta las costas azotadas por el viento donde el sol se hunde en el Atlántico, cada paso es un descubrimiento, cada etapa una revelación.

Invitamos a los viajeros, aventureros y buscadores de significado a emprender este viaje único. El Camino del Atlántico espera, listo para contar su historia a través de tus pasos. ¿Estás listo para responder a la llamada de este Camino? Planifícalo haciendo Click aquí

 

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